Llega el otoño: Crocus nudiflorus

Ya tenemos aquí el otoño. Estos azafranes silvestres, Crocus nudiflorus,  tapizan ya algunos prados de montaña. Estos son de la Punta de las Eras, en Sandiniés.

Camino de El Pueyo: Ononis tridentata. "Arnallo"

mata de arnallo en suelo de yeso. El Pueyo.
Junto al romero, las jaras, la hierba badallera y el tomillo, el arnallo es arbusto fundamental en las áridas laderas de El Pueyo, allí donde el yeso está omnipresente. Aunque de pequeño porte, se extiende horizontalmente formando una cobertura abigarrada sobre el blanco suelo. Es planta en extremo austera, sobreviviendo en los lugares expuestos al sol. Con poca humedad aguanta todo el verano. 

mata y flor de arnallo en primavera.

Su adaptación milenaria a la vida árida ha provocado que las hojas sean pequeñas , evitando así la transpiración excesiva, y gruesas,donde  acumulan agua. Estas hojas a menudo presentan algunos dientes en su extremo, a veces hasta 5 , aunque el nombre específico se acuerda sólo de tres dientes.
Pese a las duras  condiciones en que vive tiene una floración dilatada. En primavera veremos que los chesos adquieren un tono verde intenso y se cubren de intensos tonos rosados por las flores. Y llegado otoño todavía tienen la floración activa, aunque más discreta.
flor y fruto de arnallo en Septiembre
Es planta que no pasa desapercibida a conejos y liebres que gustan de sus tiernos brotes. Igualmente el ganado ovino se aprovecha de sus nutrientes, y sobre todo de la sal que en sus hojas contiene. El hombre ha utilizado el arnallo como combustible para hornos. Recuerdo un rústico horno, próximo al puente de Santa Fé, en el río Vero, donde se cocía no sé si cal o yeso y que utilizaban éste combustible entre otros. 
Como es planta perteneciente a la familia de las leguminosas, ahora en estos últimos días de septiembre podremos ver los arnallos no sólo con flor, sino también con las pequeñas judietas que son sus frutos.

Pico Robiñera

recorrido y ubicación de las panorámicas.
 Ascensión al pico Robiñera, algo más de tres mil metros de altura. Una jornada de límpida atmósfera y agradable temperatura. La pista que parte de Chisagüés sube hasta el llano de Petramula con algún tramo bastante deteriorado. Desde que habíamos subido a los ibones de la Munia desde Pineta, Marisol y yo teníamos en mente esta excursión y ahora nos acompañan nuestro hijo Diego y dos amigos suyos, Néstor Arilla y Marina Klass.

Los pastos marcan ya las tonalidades otoñales. A la izquierda , el collado  que, siguiendo el sendero GR nos llevaría hasta los llanos de Lalarri, bordeando los picos Piedra Mula y la Estiba.  Nosotros  no remontamos por allí, seguiremos hacia la derecha, dirección norte.

























En cuanto tomamos algo de altura contemplamos todo el valle de Chisagüés. El pico Comodoto muestra su silueta atrevida de la cara Norte. Después comprobaremos que su fiereza es aparente. Alguna silueta comienza a dibujarse en la lejanía, prometiendo buenas perspectivas para el resto de la jornada.






















Estamos a unos 2.400 metros. La sierra de Espierba , de formas más amables, contrasta con la más adusta sierra de las Tucas, que aparece detrás. Entre ambas sierras, el valle de Pineta.





















Los jóvenes del grupo, cerca del cuello de Las Puertas, con el pico Robiñera detrás. 

A 2.700 metros, las calizas muestran este curioso aspecto. Un estrato ha quedado exhumado. Tiene intrusiones de material más blando y se está formando una erosión diferencial a pequeña escala que no sigue la línea del valle.


Esta singular geología queda más explicada viendo los serpeantes pliegues que forman el pico Chinipro. Detrás ya se comienzan a ver los glaciares del Monte Perdido. El collado de Añisclo se muestra como una gran puerta hacia el cielo. A la izquierda del collado de Añisclo, el pico La Suca (2.802 mts) , y a continuación,como tres gemelas, las Tres Marías: Tuca Punchuda, Tuca Roncha y Tuca Plana.

A las calizas se suceden franjas de esquistos verdosos. Ya en la cresta , rozando los 3000 mts. un pliegue ha quedado totalmente aislado, como la ojiva de un edificio arruinado.






















Pocas plantas presentan todavía flor. En estos cresteríos encontramos esta pequeña planta , quizá Pritzelago alpina subsp. alpina, crucífera que se aferra como puede en estas inestables superficies.
















También en la cresta, ya muy cerca de la cima, a 3.000 mts. forma algunas ronchas en las rocas esta planta cespitosa , posiblemente Armeria alpina.


La cresta permite unas excepcionales panorámicas, en este caso sobre el valle de Barrosa, cerrado por el pico del Cabo. A su costado se abre el valle de Trigoniero con cumbres en los Picos del Ibonet y Urdiceto. De fondo el macizo de  Posets, y Bachimala

Sin duda la estrella de esta ascensión es la panorámica que se contempla hacia el Macizo de Monte Perdido.





















A nuestros pies los lagos de La Munia. Peña Blanca no requiere presentación. De fondo El macizo de Monte Perdido.
Vale la pena hacer un recuento de las cumbres.
Más discreta, pero también más cercana está la cima de La Munia

La vuelta nos brinda la oportunidad de fotografiar la cresta de Robiñera...
...y disfrutar de las extraordinarias sensaciones que ofrece subir a una montaña.


Datos de la ruta:
Domingo 16 de Septiembre.
Altitud en la salida: 1.920mts. Llano de Pietramula. Valle de Chisagües, río Real
Altitud en el pico: 3.005mts.