Camino de El Pueyo. Helianthemum violaceum


Comienzan a aparecer las flores de Helianthemum violaceum, a veces casi solitarias en otras ocasiones en amplios ramos.
Es una planta perenne de finos tallos leñosos en la base que levanta múltiples ramas de palmo y medio coronadas por racimos laxos de flores. Las hojas son estrechas, lineares, de margen revuelto. Los botones florales muestran unos sépalos con costillas prominentes entre los que se ven colores purpúreos. Estos capullos tienen el ápice retorcido. Los estambres son todos fértiles, provistos de mazo productor de polen, característica que distinguirá a este género del próximo género Fumana. 
Por aquí es frecuente que el caminante encuentre esta especie con los pétalos rosados con mácula amarilla,  aunque la típica sea de pétalos blancos. Veremos cómo toda la planta está recubierta de fino tomento  blanquecino.
Los botánicos especializados en taxonomía manifiestan la dificultad para distinguir esta especie de otras afines (pobre consuelo para aficionados como yo, que cada primavera repaso sus caracteres y me asaltan dudas sobre su identificación). Esta dificultad en la identificación proviene de la gran tendencia que tiene este género en hibridar y producir introgresiones. Esta última capacidad, que significa que caracteres de una especie pasan a algunos individuos de otra como resultado de cruzamientos, me trae a la mente el debate actual sobre la transferencia de caracteres por manipulación genética. La manipulación genética tradicional  siempre se ha realizado en la agricultura, sus principales procedimientos han sido la selección y las  hibridaciones. La actual capacidad técnica permite una manipulación más selectiva y planificada. Un argumento en contra de esta práctica es la seguridad sanitaria en productos que han sido manipulados. Aun si pudiéramos dar por válida dicha seguridad, otras dudas me asaltan. ¿De qué manera las nuevas especies interactuarán con las ya existentes? ¿ En qué grado puede afectar a otras variedades productivas o improductivas con las que entrarán en contacto las especies modificadas? ¿Cuál será el efecto en cadena resultante? Me preocupa su efecto sobre la biodiversidad, pues la producción de especies vegetales genéticamente modificadas va dirigida a una práctica agrícola intensiva y de distribución planetaria, y por tanto de producción homogénea. ¿Cuál será el lugar que ocupará el agricultor medio o pequeño, cada vez más presionado para utilizar esas especies modificadas?
Veo Helianthemum roseum mientras paseo camino de El Pueyo, y pienso que quizá exagero, que hay un factor que no he contemplado. Es el factor humano, su psique. El ser humano disfruta con la diferenciación. Se quiere distinguir. Si no le gusta vestir como el vecino de al lado, si trata de personalizar su casa, su coche, su aspecto. ¿No querrá comer también aquella variedad diferente de tomate, de garbanzo, de lechuga? ¿No querrá vestir una ropa de algodón que sabe se ha cultivado de manera diferente? ¿ No se revalorizarán las semillas que ahora se están guardando con mimo en los  bancos de biodiversidad, que desde hace algunos años están creando agricultores interesados en salvar su identidad y su economía?
Identidad y economía.En un mundo global, parece una combinación subversiva. 

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